Estefanía
Un poco de mí...
Hola! Mi nombre es Estefanía, no me gusta mucho usar mis apellidos y antes no me gustaba mi nombre. Tengo 20 años y amor por tantas cosas que terminan siendo ninguna.

Cuando me planteé iniciar este ejercicio no sabía muy bien por dónde empezar, si bien soy una persona MUY introspectiva, no es fácil hablar de mí misma, entonces llegué a la conclusión de que debía empezar por lo que es importante para mí, pues ¿qué puede hablar más de mí que lo que amo?: Dios; si bien suele ser un tema controversial, sé que no debo dejarlo pasar solo porque pueda incomodar a otras personas. Para mí es de las cosas más valiosas en mi vida y la razón por la cual la vida, por más difícil que sea, vale la pena. Mi familia; ellos han contribuido en gran parte a lo que soy, por ellos sé lo que significa el amor incondicional (en serio, incondicional) y la habilidad de resistir cualquier prueba que se atraviese en el camino. Mis amigos y pareja; si bien lo último es un poco nuevo y aún no me acostumbro, debo reconocer que me ha traído mucha felicidad últimamente. En cuanto a mis amigos, son de los regalos más bonitos que tengo y no sé qué haría si no tuviera a quien acudir en esos momentos en que la vida se torna un poco gris o esos días en que celebrar logros huele a compañía. La música; hay cosas que me quitan las palabras porque siento tanto que no lo sé expresar, la música es una de ellas. Para mí no hay nada más extraordinario, mágico y catártico que la música. Siempre me ha seguido desde muy pequeña y oh, cuánto me ha acompañado en momentos de soledad. Sin duda mi vida sin ella tendría muchos tonos grises.

Aunque no lo parezca porque sonreír se me da de manera natural, suelo ser una chispita que se prende por cosas pequeñas y es algo que últimamente la vida me ha insistido que debo cambiar. Sobrepienso mucho y a veces, desafortunadamente, me preocupa lo que puedan pensar de mí. Tiendo a dejarme arrastrar en ocasiones por la melancolía aunque no por largos periodos de tiempo. No siento confianza fácilmente en los demás y la paciencia no es mi virtud.
Por el otro lado, soy muy sensible a las cosas bellas, las cosas que vienen desde el alma, a una canción, un paisaje, los colores (amoooo los colores), el mar, una carta bien sentida o un texto bien escrito. Tengo una gran afición por escribir de la cual me he alejado un poco y a lo mejor debería regresar. Toco el piano pero pocas veces lo menciono porque la gente siempre asume que sé más de lo que en realidad sé y una de las pocas habilidades de las que me siento completamente segura es que sé inglés. Cuando más grande (sí, en edad) quiero, anhelo contribuir así sea un poquito a que los niños no sufran de desamor en sus hogares y últimamente me he ido planteando si es uno de mis propósitos.
Tendría por decir mil cosas más de mí, cuando irónicamente al principio ni sabía que decir, pero mejor hasta ahí lo dejo. Gracias por leer :)